Me plantea un familiar de este pintor, pues creo que es seguro que desciende de él muy directamente, que dedique alguno de mis habituales comentarios de Arte a este pintor aragonés que hay que reconocer que fue importante y que nos dejó hermosos paisajes de lo que ha sido la historia de esta tierra en los últimos dos siglos. Su presencia en Zaragoza, su trabajo y vinculación afectiva en Huesca y su proyección en Madrid, fueron las claves para entenderlo a caballo del cambio del siglo XIX al XX. Hoy, cumpliendo con la petición de Carlos Mastral, quiero traer a estas páginas un comentario que firmaba Chus Tudelilla, crítica de Arte de El Periódico de Aragón, con ocasión de la celebración de la exposición en homenaje de este artista e historiador aragonés de principios del siglo XX. Os pongo algunas portadas de sus obras que me parecen interesantes, para constatar este entorno de un personaje -acompañado de su hermano Pedro- empeñado en conocer mejor a su tierra.
Esto decía la doctora Tudelilla: «Anselmo Gascón de Gotor (Zaragoza, 1865-Huesca, 1927) ocupa un lugar destacado en la defensa del patrimonio de Aragón como estudioso
y valedor de los elementos identitarios; cabe citar entre sus obras los dos volúmenes de la guía Zaragoza artística, monumental e histórica (1890 y 1891), que Ibercaja publicó en edición facsímil en 1993; y la campaña que emprendió en contra del derribo de la Torre Nueva, en 1891, que le llevó a organizar la Junta de Defensa, de la que fue secretario. Todos sus esfuerzos fueron en vano y finalmente la torre mudéjar fue demolida en 1892, fecha de la publicación del estudio La Torre Nueva de Zaragoza: cuestión de actualidad, a cargo de los hermanos Pedro y Anselmo Gascón de Gotor. Fue entonces cuando Anselmo decidió instalarse en Madrid, hasta que en 1901 trasladó su residencia a Huesca, de donde era su esposa. En Huesca abrió academia, impartió clases de dibujo en el Instituto de Segunda Enseñanza, y siguió con los estudios sobre patrimonio aragonés».